La mañana del 17 de junio de 2025, en Salou, Tarragona, se desató una ola de violencia cuando un grupo de manteros, mayoritariamente de orig...
La mañana del 17 de junio de 2025, en Salou, Tarragona, se desató una ola de violencia cuando un grupo de manteros, mayoritariamente de origen subsahariano, destrozó varios coches de vecinos durante un operativo policial contra su actividad delictiva relacionada con el top manta. El incidente tuvo lugar en el barrio de La Salut, donde los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional desplegaron unos 300 agentes en una operación conjunta para desmantelar una red dedicada a la venta y distribución de material falsificado. La acción, que comenzó a las 6:00 de la mañana, incluyó registros en más de una decena de almacenes y pisos, resultando en la detención de 19 personas y la incautación de una cantidad significativa de productos ilegales aún por cuantificar.
Los enfrentamientos comenzaron cuando los manteros, al percatarse del operativo, intentaron bloquear las calles cercanas, levantando barricadas con mobiliario urbano y lanzando piedras contra los agentes. Esta reacción violenta dejó a tres mossos heridos leves y causó daños en los cristales de al menos una decena de vehículos estacionados en la vía pública, especialmente en la calle Carles Roig, según testimonios de vecinos y reportes policiales. Los disturbios, que se prolongaron durante varias horas, incluyeron enfrentamientos directos con los antidisturbios, quienes utilizaron escudos y lanzadoras de proyectiles de foam para dispersar a los alborotadores. La tensión se agravó cuando los manteros intentaron proteger sus almacenes, donde se almacenaban artículos falsificados como ropa deportiva, zapatillas y gorras de marcas conocidas.
Este no es un incidente aislado. Apenas dos semanas antes, el 5 de junio, una operación similar de la Guardia Civil en tres almacenes de Salou, que confiscó 8.336 artículos falsificados valorados en millones de euros, también desencadenó protestas violentas. En esa ocasión, los manteros cortaron el paseo de Miramar durante más de cuatro horas, exigiendo negociaciones con el Ayuntamiento tras sentirse “engañados” por una reunión previa. Los vecinos, hartos de la situación, han denunciado un aumento de la inseguridad, con incidentes como el apuñalamiento de un operario de limpieza en Cambrils por un mantero el 9 de junio, lo que ha intensificado las quejas contra la supuesta permisividad de las autoridades locales. La plataforma ciudadana “Mi Barrio Seguro” convocó una concentración el pasado fin de semana para exigir medidas contundentes, destacando el deterioro del espacio público y la competencia desleal al comercio local.
El Ayuntamiento de Salou, liderado por el socialista Pere Granados, ha evadido responsabilidades, culpando a Cambrils por el flujo de manteros y reclamando más recursos policiales a las administraciones superiores. El concejal de Seguridad Ciudadana, Sebastià Domínguez, ha pedido una Área Básica Policial propia, pero los vecinos critican la falta de acción efectiva, señalando que los manteros operan con horarios organizados y apoyo de mafias. Por su parte, los Mossos han destacado que el operativo busca cortar de raíz la distribución de mercancía falsificada antes de la temporada turística, aunque reconocen que la resistencia de los manteros complica el control.
La situación ha generado un debate polarizado. Mientras algunos medios y partidos como Vox denuncian una “mafia organizada” que actúa con impunidad, otros sectores abogan por soluciones que incluyan regularización y alternativas laborales, aunque estas propuestas chocan con la ilegalidad de la actividad. En redes sociales, la indignación de los vecinos se mezcla con críticas a la gestión política, con videos de los destrozos circulando ampliamente. La operación sigue en curso, y las autoridades no descartan más detenciones, mientras la comunidad espera una respuesta que frene la escalada de violencia en esta localidad costera.
COMMENTS